El Banco Central Europeo dejó, como se esperaba, sin cambios los tipos de interés en cero, e incrementó el plan de compra de bonos, en el marco de la crisis generada por la pandemia, en 500 mil millones de euros, en un plazo que se extenderá hasta marzo de 2022.
Esta fue la nota saliente de un jueves que no ofreció tanto en el mercado de divisas como parecía, y que redundó en una apreciación ligera del euro, que se fue apagando con el paso de las horas.
Distinga es la situación de la libra esterlina. A mediados de la sesión americana del jueves, el primer ministro británico Boris Johnson advirtió a la población que es muy probable que haya un Brexit sin acuerdo, lo que en otras palabras significa una cuesta difícil de remontar. Si ello ocurre, será otra promesa no cumplida por Johnson, luego de violar el acuerdo al que había llegado con la Unión Europea para una salida ordenada, y de haber generado una solución pírrica para la cuestión de la frontera irlandesa.
Demasiado bien le está yendo a la libra con este panorama, y si no fuera porque Estados Unidos emite dólares al estilo de los gobiernos más populistas del mundo, la pobre libra estaría bien por debajo de 1.2500, acusando el efecto de la novela del Brexit, iniciada hace más de 4 años. Uno se pregunta, en este contexto, si es lógico sostener la salida después de tanto tiempo cuando, por ejemplo, los mandatos presidenciales son puestos a consideración de la población de cada país en promedio cada 4 años, con elecciones parlamentarias de medio plazo en la mayoría de los casos.
El yen sin cambios, en 104.05, parece anticipar que no le será fácil al dólar ganarle la contienda en el corto plazo, salvo la superación de 104.50, muy lejos para lo que la moneda nipona suele moverse por día. El otro activo de refugio, el oro, cae este viernes, luego de llegar a 1875 dólares en su máximo semanal, ante la falta de avances en el plan de estímulo a la economía en Estados Unidos, una vez más empantanado en los laberintos en que los legisladores suelen hacer entrar los proyectos cuando no les interesa. Si Usted pensaba que los políticos son así solo en su país (no importa donde se encuentre), tenga la tranquilidad de saber que también en Estados Unidos son así. O peores.
Los futuros de los índices de Nueva York comienzan a dar signos de debilidad en estas horas, probablemente por el mismo motivo por el que cae el oro. Si no existe la liquidez esperada, las acciones caen, lo cual demuestra el divorcio absoluto de la bolsa con la economía. El alarmante hombro cabeza hombro que presentan los futuros del Dow Jones es muestra de que la sesión del viernes puede ser complicada en Wall Street.
Los informes del día son sobre todo para la estadística. El índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan (preliminar) y el índice de precios mayorista no tendrán impacto en los precios, y pasado el mediodía de Nueva York veremos una pausa en las acciones y el dólar.
Eso sí: es conveniente cubrir posiciones en la libra, si es posible no dejarlas abiertas, alejar muchos puntos los stop loss y reducir los riesgos. La apertura del lunes será para verla de lejos.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.
Adrián Aquaro
Trader College