El principal impedimento a corto plazo para batir esta cota en IAG está en el nivel de 1,923 euros por título.
Por Álvaro Giménez-Cuenca (XTB)
IAG resurge en suelo bursátil en la recta final del año, impulsada por la noticia del pasado 9 de noviembre, cuando la farmacéutica Pfizer anunció los primeros datos de efectividad confirmada de su vacuna contra la Covid-19.
Pese a que la noticia en general tuvo un notable impacto sobre varios sectores cíclicos, el grupo de aerolíneas que aúna Iberia, British Airways y Aer Lingus -entre otras- se revalorizó en torno a un 28% en dicha jornada. Desde entonces, acumula un remontada de casi un 63% de su valor.
En términos generales, IAG aún tiene un largo y arduo camino por delante en lo referente a sus estados financieros. Pese a su reciente escalada en bolsa, así como a sus proyectos de cara a final de año -que incluyen la reactivación de Iberia, la cual ofrecerá vuelos al 40% de su capacidad hasta entonces-, lo cierto es que la reducción de gastos de personal, costes fijos ligados al combustible y derechos de emisión no han compensado el ritmo de crecimiento en lo referente a ingresos.
Actualmente, el grupo encadena tres trimestres con ingresos brutos significativamente inferiores a lo observado en 2019. En el segundo trimestre, esta cifra ha sido de en torno al 43% de lo observado en el mismo periodo del año anterior, y en el tercero, de apenas el 34% con respecto a dicho periodo de 2019.
Asimismo, la ratio deuda financiera neta ha crecido notablemente, dejando de manifiesto la delicada situación financiera del grupo, que ya solicitó una ampliación de capital el pasado mes de octubre.
Con base en lo comentado anteriormente, IAG se enfrenta a un escenario de obligada reducción de sus niveles de apalancamiento financiero (ratio de endeudamiento superior al 180%). También estará fuertemente ligada a la reactivación de los canales aéreos para recuperar paulatinamente sus cifras de ingresos.
A nivel técnico:
Tras el crecimiento del 63% desde el 9 de noviembre, IAG busca atravesar la frontera de los 2 euros por acción, cuyo principal impedimento a corto plazo es el nivel de 1,923 euros.
El último gap alcista (registrado al inicio de la sesión del jueves) refuerza el momentum alcista, si bien el indicador RSI muestra zona de sobrecompra. Esto podría empujar la cotización hacia su soporte más cercano, ubicado en 1,792 euros.