Apple presentó por fin el martes sus esperados nuevos modelos de teléfono, anunciando lo que muchos analistas creen que es otro ciclo de supercrecimiento para el gigante tecnológico.
La compañía con sede en California dio a conocer cuatro modelos diferentes de iPhone: el iPhone 12 mini, un modelo de 5,4 pulgadas desde 699 dólares; un dispositivo de 6,1 pulgadas desde 799 dólares, un modelo Pro de 6,1 pulgadas desde 999 dólares; y un modelo profesional de 6,7 pulgadas desde 1.099 dólares.
Todos estos iPhones funcionan con un nuevo estándar inalámbrico, conocido como 5G, que puede transmitir datos hasta 10 veces más rápido que la tecnología 4G LTE actual. El iPhone 12 ofrece una nueva fisionomía, con los bordes más planos, que recuerda al iPhone 4. Los precios de los nuevos teléfonos van más o menos en consonancia con los del año pasado, aunque el 12 Mini es la versión nueva más económica.
El director ejecutivo de Apple, Tim Cook, que organizó la presentación virtual, ha confirmado que el soporte 5G está llegando a toda la gama de nuevos iPhones. El director ejecutivo de Verizon, Hans Vestberg, que también participó en el evento, dijo a la audiencia que el servicio 5G llegaría a 60 ciudades de Estados Unidos a finales de año.
Verizon también está encendiendo su red 5G de banda baja en más de 200 ciudades para ofrecer una amplia cobertura, y añade: «Hasta ahora, la mayoría de la gente ha adoptado un enfoque de cautela en cuanto al 5G. Estaban esperando a que el 5G se hiciera realidad. Bueno, pues hoy, con el iPhone, la espera ha terminado».
A pesar de la ganas que tenían los compradores de que llegaran los nuevos modelos, las acciones de Apple no reaccionaron demasiado el miércoles tras el lanzamiento, cayendo ligeramente durante la jornada y cerrando en 121,19 dólares, con un alza del 0,07% en el conjunto de la jornada.
La reacción negativa inicial, sin embargo, no respaldaba la visión alcista de muchos analistas en cuanto a un estímulo de la demanda que podrían crear los teléfonos habilitados para 5G en los próximos meses.
Los nuevos precios hacen más atractivo el iPhone
Esas expectativas y el éxito de Apple a la hora de impulsar los ingresos por servicios la ayudaron a convertirse en la primera empresa pública estadounidense en sobrepasar un valor de mercado de 2 billones de dólares a principios de este año. Los analistas encuestados por FactSet (NYSE:FDS) pronostican que los ingresos del iPhone aumentarán un 15% hasta 160.000 millones de dólares en el año fiscal que comenzaba el 1 de octubre. Eso está a unos 6.000 millones de dólares de los máximos históricos registrados en el año fiscal 2018, cuando el iPhone X de 1.000 dólares ayudó a reforzar las ventas incluso cuando los envíos no alcanzaron nuevos máximos.
«La dinámica de precios es la aplicación revolucionaria para el lanzamiento del teléfono», escribe Harsh Kumar, de Piper Sandler & Co., en una nota de investigación citada por Bloomberg. «Los precios no han cumplido las expectativas, lo cual es importante en la actual pandemia mundial».
Apple ha estado luchando para revivir el crecimiento del iPhone ahora que los consumidores se aferran a sus teléfonos más tiempo. Tras la recesión desencadenada por el COVID-19, esa tarea se ha vuelto más difícil pues millones de personas han perdido sus empleos y muchas empresas han tenido que cerrar. Los ingresos trimestrales de este segmento alcanzaron su punto máximo en el primer trimestre del año fiscal 2018 de Apple. Pero los precios competitivos de Apple, el primer gran rediseño en tres años y el reclamo de una velocidad más rápida podrían incitar a los usuarios a actualizar sus teléfonos tan pronto como la economía global salga de la recesión.
Factor China
Los analistas también son alcistas en cuanto a las ventas en China, el segundo mercado más grande de Apple, donde las redes 5G son más avanzadas que en Estados Unidos.
Dan Ives, analista de Wedbush Securities, estima que 350 de los 950 millones de iPhones de todo el mundo entran actualmente en el rango de los potencialmente actualizables.
En una entrevista para la CNBC, Ives, que ha lleva meses pronosticando un superciclo, ha dicho: «Realmente todo se reduce a si Apple puede superar el pico de los 231 millones de unidades de 2015. Si puede, entraría en el Salón de la Fama de Cupertino como un superciclo. Si no, la decepción se reflejará en las acciones».
Incluso aunque Apple no generara suficiente impulso para sus nuevos modelos en medio de una pandemia y una recesión global, la estrategia de diversificación de la compañía, apartándose del hardware, está funcionando muy bien y ofrece una buena razón para mantener el entusiasmo.
Con el creciente beneficio de sus servicios, la compañía también está consiguiendo más ventas de sus accesorios de hardware, como AirPods y Apple Watch, que han estimulado un impresionante crecimiento de su negocio de wearables. Durante la presentación de ayer, Apple también dio a conocer sus primeros auriculares Beats para admitir el modo de carga USB-C, reemplazando su puerto Lightning patentado con el Beats Flex de 50 dólares.
RBC Securities, que elevó su objetivo de precios para Apple de 111 a 132 dólares, dijo en una nota ayer que la próxima oferta Fitness+ de AAPL es una incorporación que vale la pena.
La nota decía: «Además de una contribución significativa a los ingresos/BPA, esperamos notables oportunidades de sinergia en Watch/TV/iPad/Services y vemos la oferta como una forma más de impulso de la lealtad de los clientes por parte de AAPL y, lo que es más importante, de impulso de la repetición de compras».
En conclusión
Apple sigue siendo una acción atractiva para comprar incluso después de su repunte del 65% este año. La máquina de innovación de la compañía, su segmento de servicios en crecimiento y sus dispositivos portátiles ofrecen una razón sólida para sentirse entusiasmado con sus acciones incluso aunque los nuevos iPhone no generen los resultados deseados en el corto plazo.
Haris Anwar/Investing.com
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