Se inicia un mes de definiciones en los mercados, con una gran cantidad de informes y en plena carrera electoral de cara a las elecciones de noviembre en Estados Unidos.
Más allá de que la crisis sanitaria no cede, y la económica se sigue ampliando, la contienda política entre el actual presidente, Donald Trump, y su adversario, el opositor Joe Biden, se hará sentir con fuerza en las próximas semanas.
Trump “corre detrás” a Biden, con una desventaja impensable a inicio de año, cuando la economía brillaba y su presidencia atravesaba su mejor momento. Había firmado un acuerdo con China, su liderazgo se hacía tangible, y se encaminaba a la reelección sin dificultades. La aparición del virus cambió todo. La economía se derrumbó en pocas semanas, y las encuestas le dan una ventaja de más de 10 puntos a Biden.
De allí es que los datos de julio, de los cuales los más importantes se conocerán esta semana, tendrán una singular importancia. Las encuestas de empleo, tanto la del Departamento de Trabajo como la de la firma ADP, del sector privado, serán claves. Los primeros pronósticos hablan de la creación de 1.5 millones de empleos en julio, una cifra muy respetable, pero lejana a los casi 5 millones de junio, lo que anticipa una recuperación lenta del sector.
Pero también los datos de manufacturas (que se conoce este lunes a las 10:00 del este), y el de servicios (el miércoles) marcarán el ritmo. Ambos se esperan en una fase de expansión (por encima de los 50 puntos), cota que recuperaron en junio, luego de una brutal caída de los meses anteriores.
Con todo, el dólar logró, sobre el final de la sesión del viernes, recuperar algo de sus pérdidas de toda la semana, en especial ante el yen, que se había fortalecido hasta la zona de 104.15. El euro y la libra esterlina exhiben un ligero tono bajista en las primeras horas del lunes, a la espera del dato de manufacturas mencionado, a cargo de ISM.
Respecto a las materias primas, tanto el oro como el petróleo mantienen sendos tonos bajistas, con el metal precioso coqueteando cada día con nuevos máximos históricos, y los futuros del WTI apuntando a máximos desde marzo, mes donde comenzó su debacle histórica.
Respecto a la bolsa de Nueva York, después de una semana que alternó buenas y malas, es probable que defina una dirección más clara en los próximos días. La liquidez ayuda, sin dudas, pero los datos negativos pesan en el ánimo de los mercados.
Después de una sesión que estimamos no tendrá movimientos del todo relevantes, la sesión asiática del martes ofrecerá como atractivo el anuncio de política monetaria del Banco de la Reserva de Australia (martes 12:15 am del este).
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.
Adrián Aquaro
Trader College