Lentamente, los temores a un rebrote del virus se han materializado, y puntualmente en China han aparecido unos 80 casos, lo que obligó a las autoridades a aislar varias ciudades, entre ellas la capital, Pekín. Pero también en Estados Unidos se complicó la situación, con varios miles de casos confirmados. El jueves pasado, estos temores habían sido el motivo esgrimido para explicar la caída de los mercados, aún cuando este estado de cosas no había tenido lugar aún.
Sin embargo, una nueva colocación de fondos en el circuito económico por parte de la Reserva Federal pudo más que el virus, los contagios y los conflictos que la pandemia acarrea. Los futuros de los índices bursátiles de Nueva York vuelven a máximos desde el día 11 de junio, llevados por la búsqueda de riesgo por parte de los inversores, que ven en la liquidez un reaseguro para sus operaciones.
En estos momentos es donde más contrasta la situación de la crisis sanitaria respecto a las acciones: en momentos donde las cosas se complican, los fondos frescos de los bancos centrales impulsan a las acciones. Pero lo que los mercados esperan con ansias este martes es la cifra de ventas minoristas de mayo. Después de una caída del 17% en abril, los pronósticos hablan de un aumento del 5% el mes pasado, un crecimiento con pocos antecedentes, luego de una baja del mismo tenor. Es claro que la reapertura de la economía ha contribuido para que las ventas hayan mejorado, pero la contrapartida es que los casos vuelven a aumentar.
Al alza de las acciones se les sumó la apreciación de las monedas principales, que dejaron de lado al dólar. El euro, por caso, supera nuevamente 1.1300, cotizando al momento a 1.1328, con una tendencia alcista que, de todos modos, parece agotarse en estas horas. El euro deberá superar al menos 1.1360 para confirmar un alza más importante en las próximas horas y, por el contrario, el quiebre de 1.1295 podría hacer trastabillar al euro durante la sesión de este martes. El índice ZEW de clima económico mejoró por encima de lo esperado en Alemania, aunque poco impulso le dio al euro, que ya había acelerado durante la tarde del lunes.
La libra esterlina, en tanto, cotiza a 1.2646 frente al dólar, también con tendencia alcista en el gráfico de 4 horas, que en su caso parece un poco más consolidada que la dirección del euro. Los datos de empleo de Reino Unido, conocidos minutos atrás, arrojaron que más de medio millón de personas han encontrado empleo en mayo, frente a más de un millón en abril, una cifra por debajo de lo esperado. La superación de 1.2690, un 61.8% de la última baja del par GBP/USD y máximo del día, podría acelerar a la libra, luego de cumplir con una formación de doble suelo, cuyos mínimos en 1.2465 serán un soporte de suma importancia en los próximos días.
El yen, por su parte, dejó de lado su volatilidad de las últimas sesiones y cotiza a 107.38, con una tendencia lateral en el gráfico de 4 horas. El principal soporte del par USD/JPY aparece en 107.05, y su quiebre podría darle impulso al yen durante la sesión americana de la fecha.
En cuanto a la onza de oro, retomó su tendencia alcista luego de una fuerte baja del lunes, para cotizar en la sesión europea a 1728 dólares, presentando una clara tendencia alcista en el gráfico de 4 horas. El metal precioso tiene ahora por delante la zona de 1735 dólares, y su superación podría llevarlo a 1745 dólares, marcada resistencia para las próximas horas.
El petróleo también recupera posiciones, y se acerca a los 38 dólares. La resistencia más clara es 38.30 dólares, y su quiebre también será clave para la materia prima, que tiene en los máximos del lunes anterior, en 40.60 dólares por barril WTI su principal resistencia.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
Adrián Aquaro
Trader College