Los bancos centrales están comprando oro nuevamente. De hecho, desde 2008 han vuelto a comprar más de la mitad de la cantidad que vendieron entre 1965 y 2008, según Dan Popescu. Y lo más curioso es que la Reserva Federal de Estados Unidos no ha realizado ninguna compra o venta oficial de oro desde 1979. Sí, máximos de 50 años en compras de oro de los bancos centrales. 2019 alcanzó el nivel más alto en 50 años en las compras netas de oro de los bancos centrales. Bloomberg Intelligence informa que los bancos centrales han estado absorbiendo alrededor del 20 por ciento del suministro mundial de minas de oro». Todos nos preguntamos por qué. Curioso, además, que el oro y las acciones suben en tándem en desacuerdo entre sí, cuando históricamente ha sido lo contrario al actuar el oro como valor refugio. O así se ha dicho.
Los bancos centrales han estado comprando desde 2008. Curiosamente, algunos han vendido, algunos han comprado.
Pero la Reserva Federal de Estados Unidos no ha movido ficha:
Según Business Insider España los bancos centrales de todo el mundo, con China y Rusia a la cabeza, están comprando cada vez más oro. Buscan alejarse del riesgo de la deuda soberana con el valor refugio más tradicional.
En tiempos de guerra comercial y de nueva guerra fría por las sanciones internacionales y el Russiagate, no es sorprendente que Rusia y China ya hayan tomado el camino de la llamada desdolarización de sus economías.
Especialmente, porque Beijing hizo que la retirada gradual del billete verde coincidiera con el lanzamiento de la llamada Nueva Ruta de la Seda, un megaproyecto de infraestructura que también ha favorecido la firma de contratos bilaterales en yuanes y en moneda local, evitando el punto de referencia de la moneda mundial.
En resumen, una consecuencia natural de los cambios geopolíticos, en lugar de algo meramente económico. Esto ha traído consigo una dinámica de diversificación que tiene al oro como principal protagonista, incluso antes de que las expectativas de recesión lo convirtieran nuevamente en un valor refugio a nivel mundial.
Moisés Romero