Un estado de ánimo algo complejo ofrecen los mercados en estas horas. Diversas versiones, que por un lado hablan de un próximo acuerdo entre Estados Unidos y China, como lo expresara el martes el Secretario de Comercio Wilbur Ross, y otras que sitúan muy lejos cualquier posibilidad de acordar, tiñeron de rojo a las acciones principales en Wall Street. Los índices de Nueva York cayeron muy fuerte el martes, y siguen haciéndolo los futuros mientras se inicia la sesión europea del miércoles. Los futuros del Dow Jones quebraron una línea de tendencia alcista secundaria, y se encaminan ahora a buscar una línea principal medida en el gráfico de 4 horas, en 27670 puntos.
La caída de los índices era inminente. En varias entregas anteriores habíamos hablado de una señal alcista casi marginal, vertical y sin volumen. Bastaban algunas versiones, ni siquiera noticias concretas, para que esta corrección que estamos viendo tuviera lugar.
Los mercados se muestran impacientes respecto a las negociaciones entre las dos primeras potencias globales, a medida que se extienden los plazos, los acuerdos no llegan, y el presidente Trump comienza a complicarse de cara a la reelección de 2020.
Sin embargo, las cifras más importantes siguen acompañando su marcha: el martes, las cifras de permisos de construcción llegaron a su mejor nivel desde mediados de 2007, por lo que este mes de noviembre presenta en conjunto los mejores informes en varios meses, si se consideran en conjunto los datos de empleo, inflación, ventas minoristas, construcción y servicios.
Pero nada de ello cuenta cuando los mercados no acompañan. El alza del oro y el yen, activos de refugio, muestra que el clima se ha enrarecido, y que harán falta señales muy concretas para que ello cambie. La publicación de las Minutas de la última reunión de política monetaria del 30 de octubre podría llevar algo de alivio al dólar, y estabilizar a los mercados. El acta se conocerá a las 2:00 pm del este.
Por otro lado, el debate que mantuvieron los candidatos a primer ministro de Reino Unido para el 12 de diciembre, el actual mandatario Boris Johnson y el laborista Jeremy Corbyn, no fue del agrado de los operadores. Corbyn se mostró contundente, aunque será difícil que quiebre la dinámica que por ahora favorece a Johnson en las encuestas. Los mercados prefieren un mal acuerdo de salida de Reino Unido de la Unión Europea llevado a cabo por Johnson que un gobierno de Corbyn, que se ha radicalizado hacia la izquierda en los últimos tiempos, provocando temor en los operadores.
Como se ve, lo que viene es una sesión americana importante. Serán necesarias algunas señales claras para cambiar el humor de los operadores, y revertir la bolsa de Nueva York la caída alarmante del martes.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College