Un caso paradigmático: Sniace. La última ampliación ha sido un fracaso y no se ha podido endosar el papel como pretendía la empresa. Invertia señala:
«La cuarta ampliación de capital de Sniace en los últimos tres años se atasca. La compañía papelera ya ha consumido dos de las tres rondas de adjudicación y solo ha logrado encontrar dueño para un 36% de las acciones que se ha propuesto emitir. La compañía ha informado de que solo se han suscrito un total de 120.515.900 acciones de las 325.895.838 que la última junta de accionistas de la sociedad aprobó emitir»
Es que, señores, las cosas llegan a un punto que rozan la desvergüenza: mantenerse a flote o sin quebrar empapelando una y otra vez al inversor ya harta y no cuela más. Cuatro AKs en tres años no es diluir, es evaporar el valor de la acción, parece que las cúpulas directivas no tienen la más mínima conmiseración de sus accionistas a los que utilizan como banco gratuito para financiar su pasivo, y luego ya, ni subiendo una salvajada estos logran recuperar ni tan siquiera el nominal en el mejor de los casos.
Y si vemos cómo está la competencia, ejemplo en este caso ENCE, apaga la luz y vámonos. Es que no han colocado 205 millones de acciones, es decir han colocado poco más de un tercio de lo esperado. Accionistas de referencia como el Sr. Revuelta (que vamos, es para apiadarse ya de este hombre que parece haberle mirado un tuerto con el Popular primero, luego con Naturhouse y encima también tiene una fuerte inversión en esta empresa) y el Sr. Vallina han tenido que desembolsar más dinero que el que suponían porque la AK esta yendo muy mal.
Y cuidado, como comenta el artículo de Invertia sobre el Sr. Vallina «ha adquirido el «compromiso irrevocable» de asumir el volumen sobrante de la operación siempre y cuando no alcance el 30% del capital que le obligaría a la formulación de una oferta pública de adquisición (opa) sobre la sociedad.
Pero claro, al precio que lo haría sería de derribo porque la ampliación de capital ha sido a 0.10 euros y la acción cerró a eso mismo el viernes pasado… Las principales manos se quedan con la empresa y se quitan a los accionistas de encima ya que están pillados al 100% porque en Sniace no tiene nadie plusvalías latentes.
Como dice la canción para la leche que da la vaque se se la mame el ternero …
¿Ir a la ampliación de capital? No tiene ningún sentido para el inversor, que la suscriban las manos fuertes de la empresa, así el Sr. Revuelta y Vallina suscribirían repartiéndose en la tercera ronda las acciones no colocadas sin que ninguno de los dos se vea obligado a lanzar una OPA.
Hasta el martes la firma tiene de tiempo para buscar un caballero blanco que ponga 20 millones de euros sobre la mesa y eso con el gráfico que os ponemos realmente es difícil. La empresa adujo que la AK era necesaria para su nuevo plan estratégico pero en realidad a nadie se le escapan los fundamentales negativos de la firma y de la poca visibilidad de su negocio, por lo tanto más que salir hacia delante la AK mucho nos tememos que sea para no entrar en una concursal.
Varias firmas de inversión (y coincidimos con esta opinión) que tras la AK lo que suceda es una caída libre rumbo a cero
Fuente: Bolsacanaria