Los depósitos a plazo fijo refieren a cantidades de dinero que se colocan en custodia de una institución financiera por un límite de tiempo determinado a cambio de un monto de interés acordado previamente. Estos depósitos son un excelente instrumento para el ahorrador indisciplinado, ya que le exige preservar sus ahorros por un período de tiempo dado sin caer en la tentación de retirarlos.

El depósito a plazo fijo es un atractivo plan de ahorro y a su vez es un rival común para las cuentas de ahorro de alto interés. Como regla general, cuanto más tiempo perdura la inversión del dinero, mayor será la tasa de interés a devengar.

Consideremos algunas de las principales razones que definen al depósito de plazo fijo como un referente en las estrategias de inversiones:

• Riesgo moderado o nulo. Cada depósito a plazo fijo garantiza que el dinero ganará intereses a una tasa fija. La posibilidad de perder dinero es muy baja o ni siquiera existe, por lo que es una buena opción para los ahorradores prudentes y los inversionistas que adversan el riesgo.
• Mantenimiento bajo. Al momento de concretar el depósito, no hay mucho que pueda hacer con él hasta que termine el plazo convenido. No existen cargos o cuotas de mantenimiento para preservar su dinero.
• Protegido ante las fluctuaciones del mercado. La tasa de interés fija en un depósito a plazo significa que incluso si las tasas de interés del mercado caen abruptamente, el depósito seguirá obteniendo el mismo nivel de interés.

La conveniencia o no de optar por un depósito a plazo fijo, se deriva de las necesidades que los individuos presenten. Es decir, todo depende del estilo de ahorro que cada persona tenga, sin embargo esta clase de depósitos siempre serán demandados por quienes desean comenzar a ahorrar, quienes tengan una estrategia de inversión futura o por quienes sencillamente buscan una solución para preservar su dinero a largo plazo sin estar sujetos a los riesgos del mercado.

Si bien los depósitos a plazo son una excelente opción de ahorro forzado, se deben tomar algunas previsiones antes de depositar todo el dinero disponible en un plazo fijo. Cuando se opta por invertir el dinero al más largo plazo posible, ese dinero será atado por la duración del plazo acordado, lo que significa que no se podrá movilizar durante todo el período acordado. Si se necesita acceder a él para una emergencia, seguramente se aplicarían tarifas o cuotas por parte de la institución financiera sin que el cliente lo tenga previsto.

Ello se debe, a que las instituciones financieras generalmente pagan más intereses por los depósitos a plazo que las cuentas de ahorro normales porque pueden beneficiarse de la alta probabilidad de que los ahorristas no ejecuten el retiro de su dinero durante el plazo establecido contractualmente. En dichos escenarios se pueden diferenciar varios actores, y también podríamos ver en Raisin un panorama general de todos los depósitos.

Como dato de interés, es necesario destacar que la institución financiera se comunicará con cada cliente casi al finalizar su depósito a plazo fijo para preguntarle qué desea hacer con su dinero. El cliente a su vez, tendrá la opción de reinvertir el depósito a plazo, es decir, colocar su dinero en otro depósito a plazo con características similares al contrato anterior. Por ello, siempre se recomienda hacer una investigación antes de aceptar dicha opción, ya que las condiciones del depósito podrían haber sido las mejores en el mercado cuando se aceptó por primera vez, lo cual no significa que siempre será así.