La Reserva Federal de Estados Unidos elevó, como se esperaba, la tasa de interés del 2.25% al 2.5% en la tarde del miércoles. Si bien la medida era ampliamente descontada por los mercados, se esperaba con cierta incertidumbre el comunicado de la entidad, y la conferencia de prensa posterior, a cargo del Presidente Jerome Powell.
Y el discurso del funcionario estuvo en línea con la presunción de la mayoría. Recortó la previsión de alzas de tipos de interés de 3 a 2 para 2019, al tiempo que describió el crecimiento de la economía como “sólido”, al igual que el mercado laboral, con una tasa de desempleo en el mínimo de 49 años.
Los mercados interpretaron en una primera instancia la presentación de Powell como agresiva, dado que, en definitiva, la tasa seguirá subiendo el año próximo. Pero con el inicio de la sesión del jueves, las cosas cambiaron. El dólar inició una caída masiva que en estos mismos momentos se acelera, y que lleva no solo a las materias primas, sino a las divisas principales a apreciarse con fuerza.
Así, el euro apunta a 1.1500 en estas horas, apoyado por la debilidad del dólar, pero también por el acuerdo inminente al que llegaron la Unión Europea y el Gobierno de Italia sobre el presupuesto de este país para el año próximo. La divisa única presenta una tendencia alcista de corto plazo que podría extenderse incluso a la zona de 1.1530 sin muchas dificultades.
En tanto, el yen también gana posiciones rápidamente, cotizando al momento a 111.62, luego de detener momentáneamente su alza en 111.59 hace pocos minutos. La divisa nipona esta vez no escapó al comportamiento del resto de las divisas principales, y se mueve al alza, impidiendo movimientos de relevancia en los pares que lo unen con el euro, el franco suizo y la libra Esterlina, que también presentan movimientos al alza.
Precisamente, la libra está bajo una fuerte prueba en estos momentos. El Bank of England acaba de dejar sin cambios la tasa de interés de referencia, en el 0.75%, algo que por supuesto estaba descontado por los mercados. Tanto el BoE como todos los inversores están más pendientes de la resolución del Brexit que de un cambio en la tasa de interés. Cuando en junio de 2016 el referéndum del Brexit tuvo como ganadora la alternativa de salida de la UE, el BoE recortó preventivamente los tipos de interés, lo cual revirtió el año pasado. Y con mucha cautela elevó la tasa en un cuarto de punto este año, algo que no cambiará hasta por lo menos mediados de 2019.
La decisión del BoE no cambió el estado de cosas, y la libra apenas se movió desde 1.2680, precio anterior a la publicación del comunicado del banco central.
Si finalmente el Brexit se ejecuta, y se genera el caos económico que esta salida podría traer a la economía británica, es probable que la entidad se vea obligada a recortar la tasa nuevamente.
El petróleo, en tanto, volvió a quebrar a primera hora su propio mínimo del año, cayendo de la zona de 46 dólares. Si bien intenta ahora mismo una ligera recuperación, por ahora la misma es muy modesta, y solo la superación de 48 dólares por barril WTI podría cambiar su dinámica bajista. Esto ocurre un día antes del conteo de plataformas de Baker Hughes, cifra que se conoce los viernes y que suele tener un fuerte impacto en los precios del petróleo.
La onza de oro, por su parte, se ubica en 1256 dólares, apenas por debajo de los máximos de la víspera en 1257 dólares, y apuntando a 1262, 50% de retroceso de la caída 1365/1160, mínimo del año, desde donde inició la actual recuperación. El metal precioso mantiene una tendencia alcista de corto plazo, en línea con las divisas principales, y claramente a contramano del petróleo. Similar camino sigue la plata, que apunta a 14.80 dólares, y en menor medida el platino, que aún no logra quebrar la zona de resistencia de 800 dólares.
Por último, los futuros de los índices bursátiles de Nueva York alcanzaron nuevos mínimos de varios meses -en el caso del S&P500 desde septiembre de 2017-, antes de iniciar un movimiento de recuperación que estamos presenciando en estas horas. El tan mentado rally de fin de año parece haber quedado de lado, y aunque se produjera, es notable que a falta de pocos días para finalizar 2018, los índices alcancen mínimos anuales en algún caso, y de muchos meses en otros, lo cual muestra que el clima de negocios en Nueva York no es el mejor.
La agenda de noticias del día incluye las peticiones semanales de desempleo y el indicador de indicadores líderes, cifras algo devaluadas en estos tiempos, pero que conviene tener en cuenta a la hora de su publicación.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.
Adrián Aquaro
Trader College