El dólar resurgió con fuerza el martes, luego de un débil inicio de semana, ante una serie de factores que se conjugaron para tal movimiento.
En primer lugar, la ola de euforia que se vio el lunes durante prácticamente toda la jornada se apagó en horario europeo del martes, con una caída de los índices del viejo continente, que fue acompañada por una baja importante de los índices de Nueva York.
Los mercados comenzaron a digerir los acuerdos a los que llegaron los líderes de Estados Unidos y China el fin de semana, y la conclusión es que no fueron tan importantes como en un primer momento se pensó. En otras palabras, el optimismo dio lugar a una suerte de escepticismo que se reflejó en una recuperación del dólar, como búsqueda de refugio. En este sentido, también se ven beneficiados por esta búsqueda de activos de protección el yen y la onza de oro, ambos con fuertes alzas.
Por otro lado, desde un punto de vista técnico, varios pares del dólar habían dejado gaps que fueron cubiertos lentamente, como el del AUD/USD, que terminó de cubrirse en la sesión asiática del miércoles, entre otros. Ya habían quedado cubiertos los del USD/MXN y el del platino.
Siguiendo esta línea, se acerca el alza de tipos de interés de la Fed, previsto para la última reunión del año, que tendrá lugar en dos semanas. Precisamente, el Libro Beige de la Fed, un anticipo de lo que se discutirá en dicha reunión, es lo que se publicará en la tarde del miércoles, a las 2:00 pm del este. Desde este lugar, el dólar tiene mucho terreno para ganar.
Distinto es el panorama de la libra Esterlina. Un nuevo capítulo del Brexit, que suma incertidumbre respecto al futuro de Reino Unido, hundió el martes a la libra a un nuevo mínimo del año, en 1.2658. esta caída, que siguió a un alza importante, se produjo luego de que la oposición al gobierno de Theresa May se autoimpusiera un mayor poder de decisión, con lo que la actual líder ve nuevamente contadas sus horas en el poder.
Si la propuesta de May no es aprobada en el Parlamento, algo que ahora surge como una alta probabilidad, la Primera Ministra deberá irse y habrá un llamado a elecciones, que tendrían lugar prácticamente sobre la fecha de ejecución del Brexit. El día 11 de este mes habrá una votación que puede definir justamente este nuevo conflicto, por lo que a la libra le esperan días de alta volatilidad, tal vez mayor que la actualmente exhibe, lo que a su vez la tornará poco recomendable para operar.
El euro, en tanto, busca un destino un poco más sustentable que el de los últimos días. La ausencia de datos importantes en la Eurozona impide que la moneda única se mueva más libremente, y depende en demasía del comportamiento del dólar, que se ha mostrado errático en estas últimas sesiones. Claramente, la zona de 1.1215 asoma como el soporte más importante en el corto plazo, y su quiebre encaminará al euro a la zona de 1.1000; por el contrario, la superación de 1.1430 lo posicionaría al alza para el resto de la semana.
La agenda de noticias incluye un dato importante para el dólar canadiense: a las 10:00 del este, el Banco de Canadá dará a conocer su política monetaria, sin cambios de tipos de interés previstos. Cabe acotar que en octubre pasado, la entidad elevó por tercera vez la tasa, que quedó en el 1.75%, producto del alza del petróleo, a cuyo precio se ve atado el Loonie. Paradójicamente, el 3 de octubre el petróleo superó los 76 dólares, para perder rápidamente más de 26 dólares, hasta llegar en los últimos días a 49.40.
Justamente, el petróleo enfrenta días cruciales. El jueves finalizará la reunión de la OPEP en Viena, y puede haber novedades respecto a recortes de producción para 2019. Si esto sucede, la zona de 60 dólares aparecerá rápidamente en escena, y las monedas vinculadas al petróleo, como el Loonie, el peso mexicano o el peso colombiano, verán aliviadas sus bajas de las últimas semanas.
El peso mexicano, por caso, perdió fuertemente posiciones desde el inicio de semana, en parte por la baja sostenida del petróleo, pero también por el nivel de incertidumbre que genera en los mercados la asunción de Lopez Obrador como presidente de México. Su tendencia política provoca desconfianza en el circuito financiero, y aunque ha tratado de suavizar su discurso, poco ha logrado en su afán de brindar calma a los inversores.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Trader College