La Reserva Federal emitió el jueves su séptimo comunicado de política monetaria del año, en el cual dejó claro que habrá nuevos aumentos de tipos de interés en los próximos encuentros.
El tenor del comunicado fue similar al del mes de septiembre, aludiendo a una inflación que se encuentra en el objetivo de la entidad, y a un mercado laboral sólido, que no ofrece fisuras a la vista, al igual que el crecimiento de la economía.
El dólar, que durante los primeros días de la semana se mostró errático y perdiendo posiciones en varios frentes, logró recuperarse con fuerza, y apunta a nuevos máximos del año ante el euro, en tanto se acerca a los máximos de octubre frente al yen. Contra la libra Esterlina, si bien también se muestra fuerte, aún no logra quebrar la cota de 1.3000, en tanto el dólar australiano y el neocelandés también ceden parte de sus ganancias. El Loonie canadiense, por otra parte, llega a sus mínimos desde el 6 de septiembre pasado.
Pese a las controversias que el gobierno de Donald Trump provoca en varios aspectos, hay un consenso en cuanto a que la marcha de la economía es muy buena, y así lo refleja el comportamiento del dólar. Esta impresión también queda en los inversores bursátiles, que nuevamente llevan a las acciones de Nueva York a altos valores: el índice Dow Jones recuperó buen terreno el jueves, y si bien los futuros del viernes aún se muestran sin muchos cambios, ni siquiera un retroceso menor podría cambiar el buen clima que se ha generado en los últimos días. Esto, además, le quita incertidumbre a los mercados, que se mostraban preocupados por una victoria de la oposición en las elecciones de medio término que tuvieron lugar el martes pasado.
Decíamos antes que el euro apunta a sus mínimos anuales de 1.1300, que tocó en los últimos días de octubre y había tocado el 15 de agosto. El quiebre de este nivel, que aparece como muy probable entre este viernes y la semana próxima, podría hacer trastabillar al euro buscando ya la zona de 1.1000 próximamente. No solo la fortaleza del dólar aplica en este caso; los múltiples conflictos que atraviesa la Eurozona, con el de Italia y su presupuesto a la cabeza, están afectando negativamente a la moneda única.
La libra Esterlina, en tanto, se muestra algo más firme. Un moderado -y poco fundado- optimismo respecto a un acuerdo por el Brexit le ha dado algo de solidez a la moneda británica esta semana. No hay motivos reales para tal visión. Los funcionarios británicos y de la Unión Europea siguen enviando mensajes ambiguos y sin contenido válido, por lo que un acuerdo, al que sí o sí deberán llegar para evitar que el caos se apodere de la economía británica a fines de marzo, se torna imprescindible, pero no inminente.
Otro activo que se destaca este viernes es el petróleo, que quiebra por primera vez desde abril la cota de 60 dólares (WTI). Las sanciones de Estados Unidos contra Irán por ahora no han provocado la esperada disparada del petróleo, pero sí es llamativa su caída casi vertical de las últimas horas. Este movimiento, una tendencia secundaria dentro de la tendencia bajista principal, con una sobre venta importante de corto plazo, podría estar mostrando un final de ciclo, por lo que será importante seguir el comportamiento del petróleo en el inicio de la semana entrante.
La agenda de noticias del día incluye el índice de inflación mayorista en Estados Unidos a las 8:30 del este, y el índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan / Reuters, a las 10:00. Ambos datos ofrecen poco impacto en el mercado, pero con el dólar en franca tendencia alcista, podrían servir para darle un impulso adicional.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.
Adrián Aquaro
Trader College