Meliá Hotels es como la de los bancos españoles, ganan dinero, visibilidad total en el sector, turismo a tope, pero nada, que no les da la gana retribuírselo al inversor. Aquí la tenéis dos años sin nuevos máximos totalmente lateral y ahora encima en pleno verano, pues que no, que tras rebotar el 61,8% de su bajada de 13.6 a 10.1 de nuevo se pone fea perdiendo directriz alcista que une sus últimos mínimos desde abril y la EMA 200. Ya nos tememos la excusa para el segundo trimestre para justificar que tampoco toca aumentar valor para el accionista; el efecto divisa, sus inversores se deberán conformar con no perder el soporte vital de los 10 euros.
Fuente: Bolsacanaria