En esta vida nunca se pueden dar por sentadas las cosas, en cualquier momento éstas se tuercen y asistimos a un viraje imprevisto con las consecuencias que ello trae consigo.
Tras la junta de accionistas de Duro Felguera en la que se aprobó la ampliación de capital de 125 millones de euros, sólo resta esperar el transcurrir natural de los hechos: la junta extraordinaria del 25 de junio para presentar la colocación a la CNMV, ese día se somete a votación la emisión de las nuevas obligaciones convertibles y, si todo sale de manera favorable, la compañía espera el inicio de la cotización de las nuevas acciones a partir del 23 de julio.
Pero los inversores no pueden olvidar el hecho de que Petroza Limited, la sociedad británica, dio marcha atrás en el último momento y decidiera no renovar su opción de compra por el 24,38% en Duro Felguera, que vencía el 14 de junio. Recordemos que la opción de compra se formalizó el 1 de junio y se renovó el 7 de junio por un plazo de siete días más, por lo que podían ejercitar la opción de adquisición hasta el 14 de junio.
Y es que en Duro Felguera tenemos una de cal y otra de arena, dos razones antagonistas de cara a decidir qué hacer, si invertir o no en la compañía española.
La parte negativa es la que les acabo de comentar de Petroza Limited, hecho que le supuso a duro Felguera caer en Bolsa el viernes más de un 4%.
La parte positiva es que a los inversores les gustó el plan estratégico 2018-2021 que presentó la empresa, un plan en el que se espera obtener un beneficio neto de 170 millones de euros este mismo año (el anterior ejercicio hubo pérdidas de 245,5 millones) y los próximos ejercicios también obtendría beneficios (36 millones en 2019, 38 millones en 2020 y 51 millones en 2021). También las ventas subirían este año a 686 millones de euros y a 700 millones en el 2019.
Realmente es un valor de riesgo, no apto en estos momentos para inversores conservadores ni medios, es terreno abonado para inversores muy agresivos y que sean ágiles para reaccionar si los hechos así lo determinan.
Técnicamente hablando, sólo dos cosas destacables:
– La zona de los 0,2020 euros es el último suelo que nos ha dejado (el pasado mes de marzo), un punto de inflexión que supuso el final de las caídas y el inicio del vigente impulso alcista. Es precisamente esta zona la que seguramente inversores muy agresivos intenten comprar en busca de un nuevo rebote al alza.
– Se está culminando un patrón simétrico (generalmente de continuidad de la tendencia previa), lo que sucede es que cuando estamos inmersos en noticias de índole macro-corporativas de calado, los patrones chartistas pierden fiabilidad.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es