¿Es momento de comprar Bolsa? Tenemos una de cal y una de arena. Les explico ambas cuestiones y finalmente valoramos:
A favor
The Wall Street Journal ya lo avisó a finales de la pasada semana, el índice de sorpresas de Citigoup para la zona euro podría estar avisando de que es momento de comprar acciones europeas. Y es que una caída por debajo del nivel -70 ha sido siempre una fuerte señal de compra para los inversores en los últimos 15 años, con una excepción, el año 2008, el peor año de la crisis financiera mundial, cuando el índice cayó por debajo de -70 pero las acciones se hundieron un 33% en los siguientes 12 meses.
No hay que coger esto como un dogma, sino con una herramienta más, una referencia adicional.
En contra
Trump ha amenazado con atacar Siria, de hecho ya realizó un primer ataque a modo disuasorio mientras que Rusia dice que adoptaría represalias. Como imaginarán, de cumplirse la amenaza, las Bolsas caerían, al menos en el corto plazo.
Valoración
Si se tiene un espíritu conservador, se podría esperar, ya que si al final se producen más ataques, los números a lo largo de la historia si algo nos han enseñado es que los mercados, meses después, se recuperan y superan el precio previo a un suceso muy negativo.
Por ejemplo, con los atentados del 11 de setiembre de 2001, el suceso más grave que podemos recordar, las Bolsas recuperaron las inmensas caídas en muy poquitos meses.
Por tanto, un conservador podría esperar y si hay más ataques a Siria con represalias de Irán y Rusia, aprovechar las caídas para ir tomando posiciones poco a poco, y si no hay más ataques tomar posiciones en cuanto se aclare un poco el tema de la guerra comercial de aranceles entre USA y China.
Mucho se está hablando del aplanamiento de la curva de bonos de USA y es que hay que recordar que desde el año 1970 cada recesión ha sido anticipada por una curva de rendimientos invertida. Sin embargo, también ha habido curvas de rendimiento invertidas que no fueron seguidas inmediatamente por una recesión.
Una curva de rendimiento invertida se produce cuando los rendimientos de los bonos de corta duración superan a los de largo duración, o cuando los de larga duración caen por debajo de los rendimientos de corto plazo.
La curva de rendimiento del Tesoro estadounidense ha sufrido un aplanamiento durante gran parte del 2017, y los márgenes entre los vencimientos a corto y a largo plazo recientemente se estrecharon a sus niveles más bajos en décadas. Por lo general, este es un fenómeno que ocurre al final del ciclo y señala un debilitamiento del crecimiento.
Así pues, habrá que seguir muy de cerca este fenómeno inusual.
Respecto a China, fíjense que siempre les digo que no se agarren como clavo ardiendo a las previsiones de las casas de análisis. Pues nada, aquí tienen unos datos tremendos: las exportaciones cayeron un -2,7% al igual que el déficit mensual de 4.980 millones de dólares, en cambio las previsiones fueron exportaciones +11,8% y un superávit de 27.5 mil millones de dólares. Vamos, todo lo contrario.
Pero hay más, en febrero se esperaba un crecimiento de las exportaciones del +11%, y finalmente fue de +44,1%. En el tema de China es algo habitual, si quieren vamos a febrero 2015 que se esperaban exportaciones +14% y fueron de +48,2%, o a marzo de 2015 que cayeron -15,1% y se esperaba +9%. Y sí, hay más, en 2014 tampoco se acertó.
¿Y las Bolsas? La clave sigue estando en el Dax alemán, que es el que está marcando el camino al resto de plazas europeas. Fíjense en el gráfico como de momento aguanta su soporte y siempre frena las caídas cada vez que llega y rebota bien al alza. Ahí tenemos la clave de todo, que actualizándolo sería soporte en los 11.799 puntos (futuro Dax).
Respecto al tema macro, en Alemania, motor de Europa, la recuperación continúa, pero a un ritmo más débil, pero el riesgo comercial plantean riesgos importantes, ya que el sector coches le penalizaría bastante. La demanda del consumidor ha sido menos dinámica, el sentimiento del consumidor sigue siendo optimista, en cambio la fortaleza del euro es una de las razones por las cuales los exportadores alemanes son algo menos optimistas.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es