Si vamos más allá de los acontecimientos puntuales que han inquietado a los inversores los últimos meses, existe un motivo creciente de preocupación en el merado: ¿Estamos cerca de finalizar el ciclo bursátil alcista? Es una pregunta lógica tras un largo periodo de recuperación en los precios de los activos que se inició en los mínimos de 2009. Nicolás López de M&G Valores tiene una respuesta a esta pregunta:
Es muy difícil anticipar la duración de un ciclo bursátil ya que tenemos ejemplos de muy diferentes duraciones a lo largo de la historia. Ni siquiera aunque pudiéramos anticipar la cercanía de una recesión podríamos dar por muerto el ciclo bursátil ya que hay recesiones y recesiones. Algunas son simples ajustes de la economía que dan lugar a una corrección no demasiado importante y en ocasiones, como el caso de 2008-09, vienen acompañadas de una gran crisis financiera que provoca un mercado bajista de grandes proporciones. El actual ciclo alcista en EEUU arranca de 2009 y desde luego tiene ya una duración considerable aunque también ha habido ciclos más largos. Hasta ahora está siguiendo una evolución comparable al ciclo que se inició en 1982. Su avance neto ha sido casi idéntico aunque con una volatilidad menor pues en los años 80’ tuvo el episodio del crash de 1987.
En 1990, a los ocho años del inicio del ciclo, la economía norteamericana entró en recesión. Fue una recesión inducida por las subidas de tipos de la Fed y su impacto sobre el mercado fue relativamente suave (-15%) y sobre todo poco duradero pues en pocos meses se había recuperado. El ciclo bursátil de largo plazo por tanto no se detuvo ahí sino que siguió en años siguientes. Actualmente no se observan indicios de una posible recesión en la economía norteamericana (ni en el resto del mundo). El hecho de que el actual ciclo de crecimiento esté siendo más suave de lo normal tiene el aspecto positivo de que la economía no presenta de momento los desequilibrios que pueden propiciar el fin de ciclo (inflación, exceso de deuda, desequilibrios presupuestarios o exteriores …). Es razonable por tanto esperar que el actual ciclo económico tenga una duración mayor de la habitual o incluso aunque en algún momento hubiese algún ajuste éste no debería ser muy intenso ni provocar una grave crisis financiera. Por supuesto una corrección del 10-15% en unos pocos meses siempre es posible pero eso no es un escenario fin de ciclo. ¿Y cómo continuó el ciclo bursátil a partir de 1991? En el gráfico siguiente se puede ver.
El ciclo siguió nueve años más hasta 2.000 aunque la extraordinaria subida de 1995-2000 tuvo claras connotaciones de burbuja y no es razonable esperar ahora algo así. Una subida media del 10% anual durante algunos años más sería perfectamente asumible.
Carlos Montero
La Carta de la Bolsa