La estrategia de Grifols sigue siendo potenciar las ventas en aquellos lugares menos afectados por las medidas de austeridad, que tengan menores periodos de cobro y mejores márgenes. También continúa su proceso de expansión internacional, de hecho el 94% de su facturación tiene su origen en el extranjero (los países emergentes son una zona que ya le suponía el 15% de los ingresos).
Grifols es una de las empresas que más se beneficiaría de la fortaleza del dólar americano frente al euro, por un lado porque se reducirían los gastos fiscales y por otro lado porque se reduciría el coste de su deuda, por lo que el hecho de que el dólar norteamericano se fortaleciese con una subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos debería de ayudar en el medio plazo debido a la exposición que tiene la compañía al billete verde (hay que recordar que tiene una exposición que supera el 60% en Estados Unidos).
La compañía ganó 264 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un 1,1% más, gracias a su crecimiento en Norteamérica y en los países emergentes. Además, logró hasta el mes de junio unos ingresos de 1.951 millones de euros, lo que supone un 2,7 % más que en el mismo período del año pasado. En cambio, en Europa los ingresos cayeron un 5,7 %.
Grifols, en su afán por consolidarse en América, ha llegado a un acuerdo para adquirir el 20% de la estadounidense Singulex por 50 millones de dólares. De esta manera, Singulex concede a Grifols una licencia exclusiva de ámbito mundial para el uso y comercialización de su tecnología para las donaciones de sangre que permite garantizar la seguridad de las transfusiones.
Si observan el gráfico, pueden ver cómo el soporte que se formó el pasado mes de febrero en los 17,89 euros funcionó muy bien cuando el precio cae y lo toca, frenando las caídas y rebotando al alza. Esto sucedió en mayo y en junio. Esto implica que dicho nivel de soporte sigue vigente y mientras el precio se mantenga por encima de los 17,89 euros no habrá síntoma de debilidad, sin descartar que si es vuelto a ser tocado, asistamos de nuevo a otro rebote al alza.
Una señal de fortaleza alcista pasaría por romper por arriba los 20,60 euros.
En resumen, que cuando la Fed pase a subir los tipos de interés, cosa que como muy pronto sucedería en la reunión del próximo mes de diciembre, al revalorizarse el billete verde las cuentas de Grifols se verían favorecidas, siendo un detalle interesante para el medio plazo y permitiendo que las ganancias se incrementen.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es