El inversor conservador afronta un dilema: buscar cobijo en inversiones defensivas que apenas ofrecen rentabilidad o asumir mayores riesgos. Sin embargo, Bankinter cree que aún es buen momento para volver a apostar por el refugio más tradicional de los españoles: el ladrillo, que puede generar retornos anuales del 3% a pesar del Brexit. El ladrillo está regresando lentamente a las carteras de gestores y ahorradores, tras ocho largos años de sequía. La ausencia de inversiones atractivas en un entorno de volatilidad bursátil y tipos al 0%; sumado a la recuperación de la demanda, está volviendo a despertar el interés por el inmobiliario, el tradicional refugio de los inversores españoles.
Entre los principales defensores de este mercado destaca Bankinter, que hoy ha reiterado su apuesta por el ladrillo en su informe semestral sobre el mercado inmobiliario en España. Los expertos aconsejan adquirir activos en ubicaciones prime y áreas consolidadas, un tipo de inversión que podría generar rentabilidades anuales ligeramente superiores al 3%, con “un horizonte de inversión mínimo de tres a cinco años”. Aunque estos retornos sean modestos, superan ampliamente al 1% ofrecido por el bono a 10 años. En cuanto al área comercial, los expertos aconsejan invertir de forma indirecta, a través de las grandes socimi. En concreto, destacan a Merlin Properties, mayor empresa del sector que “la calidad y diversificación de su cartera de activos, su mayor dimensión, visibilidad de ingresos y rentabilidad por dividendo”
LA DEMANDA CRECERÁ UN 10%
Desde 2014, el ladrillo vive un proceso de recuperación que se está ralentizando pero aún está lejos de llegar a su fin. De hecho, los precios de la vivienda en España están creciendo a ritmos del 6,3%, los más elevados desde 2007 y organizaciones como la Asociación la Asociación Profesional de Expertos Inmobiliarios (Apei) reconocen que es un buen momento para comprar vivienda, al menos en segmentos como el de segunda mano, ya que los precios no van a seguir bajando.
”El mercado inmobiliario español continúa con su fase de recuperación y se confirma como un sector atractivo para la inversión”, destaca Bankinter en un reciente informe. Desde la entidad auguran que “la demanda residencial crecerá durante los próximos 18 meses”, apoyada por “El ciclo expansivo de la economía, los bajos costes de financiación y la rentabilidad del alquiler en un entorno de tipos 0% impulsarán el mercado”. El aumento de la demanda, en un entorno en el que hay una oferta muy limitada de vivienda nueva en áreas consolidadas de las grandes ciudades provocará un crecimiento de los precios de entre el 3%-5%, según estimaciones de la firma. Todo esto, a su vez, se traducirá en “una progresiva reactivación de la actividad promotora si no se ponen trabas a los nuevos desarrollos urbanísticos en grandes ciudades”, señalan”.
Bankinter prevé que la demanda de vivienda supere en España los 440.000 pisos este año, lo que supone un 10 % más que en 2015, y que los precios se incrementen entre un 3 y un 5 %, lo que para el banco es síntoma de que el sector es «atractivo» para la inversión, al «continuar su recuperación».
SIN IMPACTO DEL BREXIT
La entidad reconoce que, en un entorno de alto desempleo y precariedad laboral, la demanda permanecerá muy alejada de los máximos de 900.000 viviendas registrados en plena locura de la burbuja inmobiliaria. Pero creen que hay varios factores que permiten ser optimistas de cara a los próximos trimestres.
En primer lugar, señalan que las previsiones económicas para España son positivas, con tasas de crecimiento del 2,8% para 2016 y del 2,5% para 2017. Esta expansión permitirá reducir el desempleo, un factor decisivo para la demanda de vivienda.
Por otra parte, las condiciones de financiación están mejorando, por la combinación de un Euribor en negativo y los estímulos monetarios del BCE. Los bancos, con seria necesidad de captar crédito, también son más proclives a conceder hipotecas, aunque a tipo fijo. “La reducción de la morosidad hipotecaria hasta niveles inferiores al 5% por primera vez desde 2013 anticipan un crecimiento de la concesión de hipotecas”.
Entre los factores que juegan a favor del ladrillo también destaca el difícil momento que atraviesan los mercados. Según Bankinter, la vivienda “es una de las escasas alternativas de inversión que permiten obtener rentabilidades superiores a la inflación en el medio plazo”. En este sentido, destacan que “la rentabilidad bruta por alquiler ha aumentado hasta el 4,58% anual y supera el umbral del 10% si se tiene en cuenta la plusvalía media obtenida por la revalorización del inmueble”.
Por último, los expertos reconocen que el brexit “supondrá un freno a la demanda de vivienda vacacional en España por parte de los británicos”, pero matizan que el impacto final será limitado. Y es que los británicos solo representa una quinta parte de la demanda extranjera y que a su vez la menor demanda de vivienda de lujo en Londres “podría desviar parte de esas compras” hacia ciudades como Barcelona o Madrid.
Mar Revuelta
La Carta de la Bolsa