Una duda que me plantean mucho últimamente es ¿por qué caen las bolsas cuando cae el petróleo si se supone que la caída del coste energético es buena para las empresas?
En principio parecería un sin sentido que algo que beneficia a la gran mayoría de compañías, rebaja de los costes energéticos, podría afectar a negativamente a sus cotizaciones. Lo lógico sería pensar que la situación actual es una excepción dentro de una norma de comportamiento contrario. Sin embargo no es así como explica claramente el antiguo presidente de la Reserva Federal Ben Bernanke:
Como vemos en el gráfico a continuación, existe una correlación positiva (0,39) entre el precio de la renta variable (S&P 500) y el del petróleo. Aunque la relación entre ambos activos es volátil, a veces afecta negativamente y otras veces positivamente, la media muestra que correlación positiva. De hecho, la correlación actual ha sido superada ampliamente en los últimos cuatro años.
Dos son los motivos que explican este movimiento en el mismo sentido.
1. Qué ambos activos reaccionan al mismo factor subyacente, en este caso, la ralentización de la economía a nivel global.
Como James Hamilton, macroeconomista de la Universidad de California, defiende que los precios del petróleo, del cobre, del bonos a 10 años del Tesoro de EE.UU., y del dólar, responden principalmente a factores económicos globales y no tanto a la interacción entre ellos.
2. Otra posible razón es que la correlación entre petróleo y acciones se basa en la evolución de la volatilidad de los mercados. Si ésta sube debido a un incremento en la incertidumbre inversora, provoca una presión bajista en los activos de riesgo entre los que se encuentra la renta variable y el petróleo.
Como vemos en el siguiente gráfico adjunto la correlación entre el S&P 500, petróleo y el índice de volatilidad VIX es muy elevada, con una media de +0,68
En resumen, Bernanke defiende que el escenario actual de fuerte relación entre los precios del petróleo y las acciones es más normal de lo que el mercado cree. Por tanto, es de esperar que ante la formación de un suelo en el precio del crudo y posterior rebote, veamos un repunte similar de la renta variable.
Esta formación de suelo es algo que están destacando ya varios analistas. Juan Carlos Ureta, presidente de Renta 4 Banco, señala al respecto que: Uno de los datos más positivos de las dos últimas semanas es la formación de un aparente suelo en el precio del petróleo. Es importante que se forme ese «suelo» ya que, como venimos diciendo hace tiempo, la estabilización del petróleo y de las restantes materias primas es una condición previa, o al menos simultánea, a la «normalización monetaria» y a la «normalización económica» en general, en un entorno muy contaminado por la intervención monetaria masiva y por la represión financiera. Un entorno que necesita liberarse del desorden creado por las sucesivas QE y por los tipos de interés nominales negativos.
Carlos Montero
La Carta de la Bolsa