Muchas veces se dice que la mejor manera de hacer dinero en los mercados es entrando en el nacimiento de una tendencia y saliendo en cuanto vemos que se está produciendo la finalización de la misma. Otros opinan que es más rentable capturar los swings de la tendencia y evitar las correcciones que se producen durante la misma. ¿Alguno de ellos tiene razón en lo que afirma?
Los trend followers se caracterizan por entrar en el mercado en cuanto sus indicadores le confirman que se encuentran ante el nacimiento de una tendencia; y por abandonar la posición en cuanto el deterioro de la misma se ha consumado.
En principio, esto parece fácil. Pero la realidad es que los retrasos en la detección del inicio y del final de la tendencia hacen que normalmente sólo se pueda aprovechar en torno al 50% del desplazamiento de la misma. Es decir, si un activo encadena una subida de unos 1.000 pips (desde el mínimo hasta el máximo de la misma), en realidad el trend follower sólo va a ser capaz de capturar un rendimiento de unos 500 pips.
Por ello, los swings traders opinan que es más productivo tratar de capturar únicamente las ondas de subida en una tendencia alcista (o las ondas de bajada en una tendencia bajista) y evitar sufrir el impacto de las inevitables correcciones que se producen a lo largo de la misma.
Esto, que así dicho también parece sencillo, en realidad no es trivial de implementar. Pero si fuésemos capaces de ejecutar correctamente un swing trading sobre una tendencia, ¿realmente obtendríamos más rentabilidad que si únicamente realizásemos una operación de entrada y otra de salida en la misma?
Para ello, en primer lugar tendríamos que saber cuál es la duración media de una tendencia. En segundo lugar, es imprescindible determinar cuántos swings (ondas), en promedio, suelen completarse en cada una de dichas tendencias. Cuantas más ondas existan, más posibilidades hay de conseguir interesantes beneficios con una operativa de swing trading.
Teniendo esto en cuenta, hemos procedido a analizar diferentes activos (en frames de 4 horas) y a extraer todos los datos requeridos. En total, hemos revisado en torno a 60 tendencias y a 280 swings, cantidad bastante respetable, lo cual nos ha arrojado unos resultados bastante interesantes.
Pues bien, tras revisar en torno a 320 swings, cantidad bastante importante, hemos podido extraer los siguientes resultados (tened en cuenta que vamos a hablar de valores medios, obviamente, y no vamos a hacer referencia a la dispersión de los datos):
– El desplazamiento medio de una tendencia (ya sea alcista o bajista) es de 9,87 ATR (Average True Range). Por ejemplo, si tomamos el activo EUR/USD, cuyo ATR es de 43 pips (en el frame de 4 horas), entonces podríamos decir que sus tendencias suelen durar, en promedio, unos 430 pips.
– Una tendencia está compuesta, en promedio, de 4,83 ondas. Aquí están contempladas todas las ondas, ya sean de gran amplitud o de pequeña amplitud.
– En promedio, una tendencia contendrá un total de 2,82 swings aprovechables. Esto es, ondas con correcciones suficientemente profundas que permitan la incorporación de un swing trader. Por tanto, se deduce que habrá 2,01 ondas no aprovechables (4,83 – 2,82), con correcciones superficiales que no permiten iniciar trading.
¿Qué información podemos extraer de estos resultados? En principio, podríamos enumerar las siguientes conclusiones, que no podemos dejar de considerar relevantes:
1º) Teniendo en cuenta que una tendencia dura 9,87 ATR, y considerando que un trend follower suele capturar la mitad de los desplazamientos, entonces podemos decir que es razonable esperar una ganancia de unos 5 ATR por cada tendencia capturada (4,43 ATR, para ser más precisos).
2º) Una tendencia promedio se compone de 4 ó 5 dientes de sierra (4,83 para ser exactos). Sin embargo, en muchos de ellos no se podrá hacer trading debido a correcciones poco profundas. La única forma de capturarlos todos sería mediante una estrategia de breakout, pero para ello tendríamos que usar stops notablemente amplios, lo que nos obligaría a incrementar el riesgo.
3º) Una tendencia suele contener 2 ó 3 swings aprovechables (2,82 en promedio). Esto significa que podemos tener hasta 3 oportunidades de incorporarnos a una tendencia en curso. Estos son los puntos de entrada que debería aprovechar un swing trader.
4º) Por tanto, si una tendencia ya ha tenido 3 swings aprovechables, entonces tendremos que ser muy cautos a la hora de buscar oportunidades para incorporarnos a ella. Lo más probable es que esté próxima a finalizar y vaya a dar paso a un período de consolidación o rango lateral.
5º) Para que una estrategia de swing trading sea más rentable que una de trend following, es necesario que extraiga más de 5 ATR de beneficio en esos 3 swings aprovechables. Y lo recomendable es que superara ampliamente dicha cantidad, para compensar el esfuerzo adicional que supone la caza de swings frente al relativamente cómodo seguimiento de tendencias.
6º) Visto de otra forma, en una tendencia tendremos unas 2 ondas no aprovechables (2,01 según vimos antes). Lo ideal para capturar estos movimientos sería el empleo de una estrategia de breakout con stop ajustado: así minimizamos las pérdidas generadas en el resto de ondas (esto es, en los swings aprovechables del punto 3º).
En líneas generales, estas son las ideas más importantes que podemos extraer del análisis realizado sobre las tendencias muestreadas. Como vemos, hemos hablado de 3 grandes tipos de estrategias: trend following, swing trading y breakouts. Las 3 son incompatibles unas con otras, es decir, no se pueden aplicar a la vez (salvo en cuentas diferentes). Cada una de ellas busca un setup diferente en el mercado y será decisión nuestra elegir la que consideremos más rentable y se adapte mejor a nuestra psicología.
Dicho esto, esperamos poder realizar en el futuro algunos estudios comparando este trío de estrategias, para tratar de extraer las ventajas e inconvenientes de cada una de ellas, así como para determinar cuál es la más rentable a largo plazo.
Fuente: Tambolsa